jueves, 4 de diciembre de 2008

La violencia en los estadios


Sin duda, las barrasbravas han captado la atención por hechos violentos, mayoritariamente, en los últimos 20 años. Las barras son, al menos en Chile, abundantes en los estadios de fútbol, en la que los mal llamados "hinchas", aprovechan las grandes cantidades de gente para generar desmanes, provocar disturbios y enfrentarse entre miembros de la hinchada de su mismo equipo o el contrario. Y, claro, al haber mucha gente en un mismo espacio, aprovechan para pasar desapercibidos, ya que no cuentan con una vigilancia total de carabineros dentro del estadio.

Lamentablemente, siempre en espectáculos que congregan mucha gente, los inadaptados perjudican a los hinchas verdaderos que asisten para disfrutar del juego y alejan a las familias del estadio, provocando el temor y miedo en ellos, logrando que los aficionados teman asistir al estadio, ya que se arriesga la integridad física de cada persona dentro y fuera de él.

Pero una de las grandes razones de el comportamiento de las barras bravas, es su estado al momento de estar en el estadio: ebrios y drogados, lo cual los hace no tener conciencia de lo que hacen, ya que en ambos estados no tienen control de sus cuerpos.

Es una actitud que encontramos realmente penosa y que afecta al espectáculo, las personas que van tranquilas a ver a sus equipos y a la imagen de Chile en el extranjero.


miércoles, 3 de diciembre de 2008

Las tribus urbanas en Chile


Realmente, fue lo peor que le pudo pasar al país en los últimos 5 años. Personas, jóvenes sobretodo, tratando de destacar por su aspecto, el cual toma, según la tribu, una vestimenta ridícula y actitudes inapropiadas para la sociedad.

Las singulares tribus que se originaron en Chile entre el 2004 y 2005, son "pokemones", "emos", "visual", "otakus", "góticos", entre otras bazofias de la sociedad, que llegaron junto con conductas practicamente inmorales, que atentan contra las buenas costumbres y la ética de cualquier persona. Una de esas conductas es el llamado "ponceo", en el cual "pokemones" y "pokemonas" se besan unos a otros, sin importar los valores de persona, como sentimientos (por ejemplo) y traspasando saliba de boca en boca, actitud totalmente reprochable, debido a su antihigeneidad y todas las enfermedades que puede conllevar.

Además, uno de los temas mas de fondo en las tribus, es el aspecto. La vestimenta de cada una de estas tribus urbanas es lamentable; se puede entender que esta actitud va tras la búsqueda de identidad, pero, no es razón para estar orgullosos de hacer el ridículo. Quizás la gran responsabilidad en la actitud de los "pokemones", es la poca atención que les prestan sus padres, y buscan sobresalir o destacar por una nueva moda, buscar la atenciòn de sus pares y ser aceptados en la sociedad. Lamentablemente esa aceptación la buscan en un ambiente totalmente superficial, en donde los que más beben o consumen drogas son mas aceptados, van ganando popularidad y respeto entre ellos.

Esto último, lo de no conciliar la atención de sus padres, se ve fielmente reflejado en la conductas de los "emos", quienes, como su apodo lo dice, son muy emocionales, y es por eso que cualquier dificultad o adversidad los hace caer en profundas crisis, tener constantes depresiones y fluctiaciones del estado anímico, lo que les provoca "pensamientos negros" que los lleva a pensar en el suicidio.

Para colmo, las actitudes de estas tribus son casi un reflejo de la enferma música que escuchan: el reggaeton, que con distorcionadas letras captan la atención de ellos, tratando, entre otros temas, a la mujer solo como objeto sexual y peor aún, es que la mujer disfruta esta música tanto como los hombres.

En resumen, estamos en desacuerdo con las tribus y sus conductas totalmente fuera de lugar, su horrendo aspecto y su denigrante música; apelamos a que los padres de cada uno de esos distorcionados jóvenes intente reformar a aquel individuo para que no se pierda como persona, si es que pudiera reformarse...